Nosotros, los abajo firmantes, profesores de las Iglesias Reformadas de América Latina, ministros del evangelio, ancianos y diáconos de las congregaciones Reformadas de América Latina de ______________, del Clasis ______________, por este medio, sinceramente y en buena conciencia y ante el Señor, declaramos con esto nuestra suscripción a la fe Reformada, es decir, que creemos sinceramente y estamos convencidos de que todos los artículos y puntos de doctrina contenidos en la Confesión y el Catecismo de las Iglesias Reformadas, junto con la explicación de los puntos de la doctrina antedicha y hecha por el Sínodo de Dordrecht en 1618-19, están totalmente de acuerdo con el Consejo y la Palabra de Dios.
Por lo tanto, prometemos diligentemente enseñar y defender fielmente las doctrinas mencionadas sin contradecirlas directa o indirectamente, mediante nuestra predicación o escritura pública.
Declaramos, además, que no solo rechazamos todos los errores que militen en contra de estas doctrinas, y particularmente aquellas que fueron condenadas por el Sínodo mencionado anteriormente, sino que además estamos dispuestos a refutarlas y contradecirlas (mostrando así sus errores), y a esforzarnos por mantener a la iglesia del Señor libre de tales errores. Y, si de ahora en adelante surgiese en nuestras mentes alguna dificultad o sentimientos diferentes respecto a las doctrinas antedichas en Nuestras Tres Fórmulas de Unidad, prometemos que ni pública ni privadamente propondremos, enseñaremos o defenderemos lo incomodo en nosotros, ya sea en predica o por escrito, hasta que nosotros hayamos dado a conocer por primera vez tales sentimientos al consistorio, clasis y sínodo, lo cual pueda ser examinado allí, estando nosotros siempre dispuestos alegremente a someternos al juicio del consistorio, clasis y sínodo, bajo la penalidad que en el caso que pueda ser negativo, por ese mismo hecho, el ser suspendidos de nuestro oficio hasta nuevo aviso.
Y además, si en algún momento el consistorio, el clasis o el sínodo, con suficientes motivos de sospecha y con el fin de preservar la unidad y la pureza de la sana doctrina, consideran apropiado exigirnos una explicación adicional de nuestros sentimientos respecto de cualquier artículo en particular de la Confesión de fe, el Catecismo o la explicación del Sínodo de Dort, prometemos siempre estar dispuestos y listos para cumplir con dicho requisito, bajo la pena mencionada anteriormente, reservándonos sin embargo el derecho de apelación cuando sea que nos consideraremos perjudicados por dicha sentencia del consistorio, el clasis o el sínodo, y hasta que se tome una decisión sobre tal apelación, aceptaremos la determinación y el juicio aprobado y hecho para entonces.
Formulario modificado de la versión original de 1618-19.